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Adorarás al Señor, tu Dios, y a Él sólo servirás”. I Domingo Cuaresma. 21 de Febrero 2010 . Yo ya lo apagu é para escucharte. Adorarás al Señor No al celular. Monición de entrada.
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Adorarás al Señor, tu Dios, y a Él sólo servirás”. I Domingo Cuaresma 21 de Febrero 2010
Yo ya lo apagué para escucharte Adorarás al Señor No al celular.
Monición de entrada Ilusionados, esperanzados y necesitados, hemos venido para celebrar la Eucaristía, un encuentro para vivir unidos nuestra fe. Jesús, en el inicio de la Cuaresma, nos enseña la manera de salir victorioso de la prueba. No cae en la tentación de utilizar a Dios para sus conveniencias; no se deja seducir por el prestigio y el poder; tampoco hace un espectáculo al iniciar su ministerio. El plan de Dios es lo realmente importante.
Una mirada de fe, una mirada de fe, es la que puede salvar al pecador. (2)
Y si tu miras a Cristo Jesús, Él te perdonará, porque una mirada de fe, es la que puede salvar al pecador.
Una mirada de fe, una mirada de fe, es la que puede salvar al pecador. (2)
ORACIÓN COLECTA. Concédenos, Dios Todopoderoso, que las prácticas anuales propias de la cuaresma, nos ayuden a progresar en el conocimiento de Cristo y a llevar una vida más cristiana. Por nuestro Señor Jesucristo
Monición para la Primera lectura. El relato que hace el Israelita de la acción de Dios en el pueblo de Israel cuando va a presentar la ofrenda de las primicias, le hace recordar que Dios está detrás del éxito de la actividad humana. El hombre no puede atribuirse solo los méritos, pues el resultado no hubiera sido el mismo sin la providencia de Dios. A muchos les cuesta reconocerlo.
En aquel tiempo, dijo Moisés al pueblo: “Cuando presentes las primicias de tus cosechas, el sacerdote tomará el cesto de tus manos y lo pondrá ante el altar del Señor, tu Dios. Entonces tú dirás estas palabras ante el Señor, tu Dios: ‘Mi padre fue un arameo errante, que bajó a Egipto y se estableció allí con muy pocas personas; pero luego creció hasta convertirse en una gran nación, potente y numerosa.
Los egipcios nos maltrataron, nos oprimieron y nos impusieron una dura esclavitud. Entonces clamamos al Señor, Dios de nuestros padres, y el Señor escuchó nuestra voz, miró nuestra humillación, nuestros trabajos y nuestra angustia. El Señor nos sacó de Egipto con mano poderosa y brazo protector, con un terror muy grande, entre señales y portentos;
nos trajo a este país y nos dio esta tierra, que mana leche y miel. Por eso ahora yo traigo aquí las primicias de la tierra que tú, Señor, me has dado’.
PALABRA DE DIOS. ¡TE ALABAMOS, SEÑOR! Una vez que hayas dejado tus primicias ante el Señor, te postrarás ante Él para adorarlo”.
Tu eres mi Dios y en ti confío Tú, que vives al amparo del Altísimo y descansas a la sombra del Todopoderoso, dile al Señor: “Tú eres mi refugio y fortaleza; tú eres mi Dios y en ti confío”.
Tu eres mi Dios y en ti confío. No te sucederá desgracia alguna, ninguna calamidad caerá sobre tu casa, pues el Señor ha dado a sus ángeles la orden de protegerte a donde quiera que vayas.
Tu eres mi Dios y en ti confío. Los ángeles de Dios te llevarán en brazos, para que no te tropieces con las piedras, podrás pisar los escorpiones y las víboras y dominar las fieras.
Tu eres mi Dios y en ti confío. “Puesto que tú me conoces y me amas, dice el Señor, yo te libraré y te pondré a salvo. Cuando tú me invoques, yo te escucharé, y en tus angustias estaré contigo, te libraré de ellas y te colmaré de honores”.
Monición para la Segunda lectura. La salvación ya no depende de la ley ni de ser judío. Ha sido abierta para todo el mundo. Y desde ahora, la salvación depende de Jesús, de modo que todo el que le reconozca como el Hijo de Dios y le confiese resucitado con sus labios, habrá accedido ya a la salvación. Cualquier persona de cualquier pueblo o lugar ha sido capacitada por Dios para dar su fe a Cristo y, por tanto, para entrar en la salvación obrada por Cristo.
Hermanos: La Escritura afirma: Muy a tu alcance, en tu boca y en tu corazón, se encuentra la salvación, esto es, el asunto de la fe que predicamos. Porque basta que cada uno declare con su boca que Jesús es el Señor y que crea en su corazón que Dios lo resucitó de entre los muertos, para que pueda salvarse.
En efecto, hay que creer con el corazón para alcanzar la santidad y declarar con la boca para alcanzar la salvación. Por eso dice la Escritura: Ninguno que crea en Él quedará defraudado, porque no existe diferencia entre judío y no judío, ya que uno mismo es el Señor de todos, espléndido con todos los que lo invocan, pues todo el que invoque al Señor como a su Dios, será salvado por Él. Palabra de Dios R. ¡Te alabamos, Señor!
Honor y gloria a ti, Señor Jesús. Honor y gloria a ti, Señor Jesús. No sólo de pan vive el hombre, sino también de toda palabra que sale de la boca de Dios.
1 En aquel tiempo, Jesús, lleno del Espíritu Santo, regresó del Jordán y conducido por el mismo Espíritu, se internó en el desierto, 2 donde permaneció durante cuarenta días y fue tentado por el demonio. No comió nada en aquellos días, y cuando se completaron, sintió hambre.
3Entonces el diablo le dijo: “Si eres Hijo de Dios, dile a esta piedra que se convierta en pan” 4 Jesús le contestó: Esta escrito: “No sólo de pan vive el hombre”.
5 Después lo llevó el diablo a un monte elevado y en un instante le hizo ver todos los reinos de la tierra 6y le dijo: “A mí me ha sido entregado todo el poder y la gloria de estos reinos, y yo los doy a quien quiero.
7Todo esto será tuyo, si te arrodillas y me adoras”. 8Jesús le respondió: Esta escrito: “Adorarás al Señor tu Dios y a Él sólo servirás”
9 Entonces, lo llevó a Jerusalén, lo puso en la parte más alta del Templo, y le dijo: Si eres el Hijo de Dios, arrójate desde aquí; 10 porque está escrito: “Los ángeles del Señor tienen órdenes de cuidarte
PALABRA DEL SEÑOR Gloria a ti Señor Jesús 11y de sostenerte en sus manos, para que tus pies no tropiecen con las piedras”. 12 Pero Jesús le respondió: También está escrito: “No tentarás al Señor tu Dios” 13Concluidas las tentaciones, el diablo se retiró de Él, hasta que llegara la hora.
Yo no soy nada y del polvo nací pero tu me amas y moriste por mi. Ante la cruz solo puedo exclamar: tuyo soy, tuyo soy.
TOMA MIS MANOS, TE PIDO , TOMA MIS MANOS, TOMA MIS LABIOS, TE AMO. TOMA MI VIDA, ¡OH PADRE! TUYO SOY, TUYO SOY.
Cuando de rodillas te miro Jesús veo tu grandeza y mi pequeñez, qué puedo darte yo: solo mi ser. TUYO SOY, TUYO SOY.
ALTÍSIMO SEÑOR , QUE SUPISTE JUNTAR, A UN TIEMPO, EN EL ALTAR , SER CORDERO Y PASTOR, QUISIERA, CON FERVOR, AMAR Y RECIBIR A QUIEN POR MI QUISO MORIR.
Cordero divinal por nuestro sumo bien inmolado en salem de gracia celestial, lava mi corazón que fiel te rinde adoración.
ALTÍSIMO SEÑOR , QUE SUPISTE JUNTAR, A UN TIEMPO, EN EL ALTAR , SER CORDERO Y PASTOR, QUISIERA, CON FERVOR, AMAR Y RECIBIR A QUIEN POR MI QUISO MORIR.
Los ángeles al ver tal Gloria y majestad con profunda humildad adoran Tu poder, sin ellos merecer la dicha de probar al Rey del Cielo, hecho manjar.
ALTÍSIMO SEÑOR , QUE SUPISTE JUNTAR, A UN TIEMPO, EN EL ALTAR , SER CORDERO Y PASTOR, QUISIERA, CON FERVOR, AMAR Y RECIBIR A QUIEN POR MI QUISO MORIR.
Convite fraternal que sirve el Redentoral siervo del Señor, comida sin igual;Pan de vida inmortal, ven a entrañarte en mí, y quede yo trocado en Ti.
ALTÍSIMO SEÑOR , QUE SUPISTE JUNTAR, A UN TIEMPO, EN EL ALTAR , SER CORDERO Y PASTOR, QUISIERA, CON FERVOR, AMAR Y RECIBIR A QUIEN POR MI QUISO MORIR.
Venid hijos de Adán al convite de amor que hoy nos da el Señor, este divino Pan de tan dulce sabor, de tal gracia y virtud que da alegría y salud.