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TRATADOS EVANGELÍSTICOS

TRATADOS EVANGELÍSTICOS. “Usted no tiene que ser perfecto para compartir el amor de Cristo con alguien. Pero sí que debe buscar tener una buena relación con Dios. Si no es así, su testimonio no será efectivo.” Scott Hinkle.

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TRATADOS EVANGELÍSTICOS

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Presentation Transcript


  1. TRATADOS EVANGELÍSTICOS “Usted no tiene que ser perfecto para compartir el amor de Cristo con alguien. Pero sí que debe buscar tener una buena relación con Dios. Si no es así, su testimonio no será efectivo.” Scott Hinkle

  2. Me he hecho débil a los débiles, para ganar a los débiles; a todos me he hecho de todo, para que de todos modos salve a algunos.” (1ª Corintios 9:22) Si Pablo quería decir “de todos modos”, seguro que habría usado tratados evangelísticos como una forma de alcanzar al perdido. Un libro cristiano narra la historia verídica de un submarinista quien vio un pedazo de papel atrapado en la concha de una ostra. Cuando el hombre lo agarró se dio cuenta que se trataba de un tratado evangelístico y dijo:

  3. “No puedo aguantar por más tiempo. Su misericordia es tan grande que ha hecho que Su Palabra me siga incluso hasta el fondo del océano.” Dios usó el tratado para salvar al hombre. ¿Por qué los cristianos deberían usar los tratados? Simplemente porque Dios los usa. El usó un tratado para salvar al gran misionero Hudson Taylor, así como a muchos otros.

  4. Un día, mientras su madre estaba fuera, Hudson entró a la biblioteca de su padre para buscar unos libros. Parecía que no podía encontrar nada que le interesara, de modo que echó mano a una canasta que contenía folletos y, al acaso, cogió uno de evangelización. En esa misma hora su madre, encontrándose a unos cien kilómetros de distancia, se levantó de la mesa y entró en su habitación. Cerró su puerta, y le puso llave, resuelta a no salir sino cuando tuviera la certeza de que Dios contestaría sus oraciones a favor de su hijo descarriado. Hora tras hora imploró al Señor, hasta que de pronto ya no pudo seguir orando. Entonces empezó a darle gracias a Dios por la conversión de su hijo.

  5. Mientras tanto, en su casa, Jaime Hudson Taylor decidió leer tratado que tenía en la mano. “Leeré solamente la anécdota” se dijo entre sí. “Dejaré de leer cuando empiece el sermón”. Sin embargo, cuando se dio cuenta, no solo había leído el relato, sino también el sermón. El tratado hablaba acerca del Señor Jesucristo, el cual entregó voluntariamente su vida por el mundo entero. Súbitamente le vino un pensamiento extraño: Si Cristo murió por todo ser humano en el mundo entero, luego todo ser humano debería saberlo. Esto significaba que alguien debería contarles acerca de Cristo. Cayendo de rodillas, Hudson se entregó al Salvador.

  6. Misionero inglés en china. Gastó 5 años traduciendo el nuevo testamento al dialecto ningpo. en su muerte en 1905, habían 205 estaciones con 899 misioneros y 125.000 cristianos chinos en la misión interior de china. Solamente ese hecho sería un incentivo suficientemente grande para que los cristianos siempre usaran tratados para alcanzar a los perdidos. Sin embargo, hay aún más razones para usarlos. He aquí algunas:

  7. Los tratados pueden abrir oportunidades para que nosotros podamos compartir nuestra fe. Pueden testificar por nosotros. Hablan al individuo cuando están listos – no los leen hasta que ellos quieren. Pueden introducirse en el hogar de las personas, mientras que nosotros no. No se enzarzan en discusiones; simplemente lo consideran.

  8. El Dr. Oswald J. Smith dijo: “La única manera de llevar a cabo la Gran Comisión será por medio de la página impresa.” Charles Spurgeon dijo: “Cuando la predicación y la charla privada no están disponibles, usted necesita tener preparado un tratado… Un solo tratado evangelístico impactante puede ser la semilla de vida eterna. Por lo tanto, no salga sin sus tratados.”

  9. Si usted desea que la gente acepte su literatura, trate de saludarles antes de ofrecerles un tratado. Si consigue que le respondan a un caluroso “buenos días”, o un “¿Cómo está?” Esto prácticamente romperá el hielo y de seguro que lo tomarán. Después del saludo NO diga “¿Quiere uno?”Probablemente va a responder, “¿Qué es esto?” Por el contrario diga, “¿Ya tiene uno de estos?” Esa pregunta tiene un doble efecto. Despierta su curiosidad y le hace preguntar “¿Uno de qué?” Ese es el momento en el que se lo puede dar.

  10. También les hace pensar que se están perdiendo algo. Y de veras que lo están. Es posible que a usted le cause mucho temor el pasar un tratado. No se preocupe; usted no está solo. Todos batallamos con el temor. Respuestas al temor: La oración Pedir a Dios que le de compasión por los perdido Meditar en el destino de los no salvos Pensar detenidamente en el infierno Confrontar lo que le produce temor

  11. ¿Le gustan las montañas rusas? Algunos cristianos quieren intentar el puenting o el paracaidismo. ¿No es eso extraño? Estamos preparados a arriesgar nuestras vidas por amor al peligro, pero al mismo tiempo estamos dispuestos a permitir que un pecador se vaya al infierno por el temor de dar un tratado. Pregúntese cuantas pilas de piedras ensangrentadas puede encontrar con las que cristianos han sido apedreados hasta la muerte por predicar el evangelio.

  12. ¿Cuánta tierra chamuscada puede usted encontrar donde hayan sido quemados en hogueras? ¿De dónde viene nuestro miedo? Parte de nuestro miedo es miedo a ser rechazados. Tenemos miedo a parecer necios. Esa es una forma sutil de orgullo. La otra parte de nuestra batalla con el temor viene directamente del enemigo. El sabe que el temor paraliza. Nosotros debemos resistir al diablo y a sus mentiras. Si Dios está con nosotros, no hay nada que pueda oponérsenos.

  13. Nunca menosprecie el poder de un tratado evangelístico. Después de que George Whitefield leyó uno llamado “La Vida de Dios en el Alma de un Hombre”, el dijo: “Dios me ha mostrado que debo nacer de nuevo o se condenado”. Siguió orando: “¡Señor, si no soy un cristiano, o si no soy un cristiano real, por amor de Jesucristo, muéstrame que es el cristianísmo, para que no sea condenado al final!” Entonces su diario nos dice que “desde ese momento… supe que tenía que convertirme en una nueva criatura.”

  14. Si usted nunca ha repartido tratados. ¿Por qué no empezar hoy mismo? Déjelos en: Un carrito de la compra En los sobre donde hace los pagos En bolsillos de ropa que se prueba en las tiendas Buzones de vecinos o de correos Coches, bancos (de sentarse), cabinas de teléfono Entonces cada noche, antes de dormir tendrá un motivo por el cual orar. Que Dios use esos tratados.

  15. También tendrá un sentimiento de satisfacción por haber jugado un pequeño papel en la labor de llevar a cabo la Gran Comisión para alcanzar a este mundo moribundo con el Evangelio. No malgaste su tiempo. Haga algo para el Reino de Dios mientras tenga tiempo. Recuerde siempre: Tómese cada día, como si fuera el último, un día estará en lo cierto

  16. Relajadín: Soy cristiano, pero siento que para mí lo mejor será vivir la vida en vez de hablar a la gente Cristiano: Y eso, ¿Por qué? Relajadín: No tengo el don de evangelismo. No sé que decir. Cristiano: No existe tal cosa como el “don de evangelismo”. Eso es como decir que alguien tiene el don de alimentar a los niños hambrientos. No es un don, es amor en acción. Otra palabra para evangelismo es “amor”.

  17. Relajadín: Nunca he pensado en eso de esa manera. Quizás debería ir a la Escuela Bíblica y estudiar primero. Cristiano: Considera cuánto tiempo pasó para que la mujer junto al pozo (en Juan 4) compartiera su fe. Relajadín: Si, pero… Cristiano: No hay “peros” que valga. Simplemente, levántate por Cristo. Tu puedes Relajadín: ¿Tu crees?

  18. Cristiano: Si, tu di “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” Relajadín: ¿Qué debería hacer? Cristiano: Empieza repartiendo algunos tratados el algunos sitios Relajadín: ¿Dónde? Cristiano: En cualquier sitio. Podrías dejar un en carros de la compra o en cabinas de teléfonos. Relajadín: Pues eso sí lo podría hacer Cristiano: Nada más piensa que cuando te vayas a dormir por la noche, puedes estar satisfecho que te esforzaste por el Reino de Dios.

  19. ¿Acaso la teoría del Big Bang no desacredita el Génesis? Trate de pensar en una explosión que haya originado orden ¿Acaso la bomba de un terrorista crea armonía? Big Bangs crean caos. ¿Cómo va un bigbang a producir una rosa, manzanos, peces, puestas de sol, las estaciones, colibríes, osos polares, miles de aves y animales, cada uno con sus propios ojos, nariz y boca? Agarre un tornillo y una tuerca, láncelos con fuerza uno contra el otro, si resulta en un Rolex, la teoría del Big Bang, será cierta.

  20. Fíjese en la manera en la que los perros cruzan la carretera. Un perro cruza una carretera no siendo consciente del peligro. Va meneando la cola mientras se mete entre dos coches sin pensarlo dos veces. Los coches tuercen. Los frenos chirrían. El ruido es ensordecedor mientras que los coches chocan unos contra otros. El perro despistado deja de mover la cola un momento para mirar al montón de coches destrozados y humeantes en la carretera. Su expresión traiciona sus pensamientos. Su cerebro (capaz de enterrar huesos) no se da cuenta ni por un momento de que él es el responsable del desastre.

  21. Cuando un hombre vaga por la carretera del pecado, su cola se mueve con gusto. Piensa que eso es para lo que fue hecho. Sus pensamientos de cualquier tipo sin repercusión por sus actos son superficiales. Su mente vaga a lo largo de la lujuria, y después seguramente entrará en el camino del adulterio. De repente, he aquí un desastre delante de sus propios ojos. Su matrimonio está hecho trizas, su nombre está manchado, y sus hijos torcidos y asustados. Pero como el perro tonto, no se cuenta ni por un momento que él es el único responsable por su pecado.

  22. Esto es por lo que la perfecta Ley de Dios necesita ser expuesta delante de sus ojos entenebrecidos, para mostrarle que sus caminos no son buenos a los ojos de un Dios perfecto.

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